Es la piedra en su zapato. Richard Cisneros, el cantante bautizado como ‘Richard Swing’ durante sus épocas de mandatario, ese aquel con el que mantenía reuniones cómplices e ilícitas, a quien le ofreció un puesto de trabajo sin cumplir con el perfil requerido, es una pesada roca que carga Martín Vizcarra, y que podría llevarlo a prisión. El Juzgado Supremo de Investigación Preparatoria aprobó ayer la formalización y continuación de la investigación que se seguía contra el expresidente por el caso Richard Swing. Esto luego de que el mes pasado, de manera unánime y sin un voto en contra, el Pleno del Congreso aprobara denunciarlo constitucionalmente. El juez supremo Juan Carlos Checkley dispuso la misma medida contra Patricia Balbuena, exministra de Cultura de la gestión de Vizcarra y quien según el Ministerio Público coordinó junto al exmandatario la irregular contratación de Cisneros, al que se favoreció en dicha cartera con hasta nueve órdenes de servicios por más de 175,400 soles.(Edición sábado).