Para la empresaria ayacuchana Esperanza Rojas Gutiérrez, la política y los negocios van de la mano. Nadie se lo enseñó. Lo entendió por experiencia. En el año 2000, postuló sin suerte al Congreso por el partido fujimorista Perú 2000. Luego, en 2006, esta vez con otra organización fujimorista, Sí Cumple, se lanzó como regidora de la Municipalidad de Huamanga. Tampoco tuvo fortuna. Y en 2018, sin dejar de ser fujimorista, fue candidata a gobernadora regional por el movimiento Tecnología de Punta para Ayacucho (TEPA), pero perdió ante su contrincante de la Alianza Renace Ayacucho, Wilfredo Oscorima Núñez. Sin embargo, para la siguiente elección, cansada de las derrotas, Esperanza Rojas se aseguró reclutando a Oscorima como candidato al Gobierno regional por Wari Llacta, la nueva versión de TEPA. Entonces, recién alcanzó el poder, por intermedio de Wilfredo Oscorima.