Para el economista Carlos Adrianzén, antes que castigar los ahorros con más impuestos es preferible iniciar una reforma del Estado, aplicando una efectiva medida de austeridad, de tal modo que los recursos que se ahorren se destinen a los programas sociales. "No entiendo por qué el empeño de seguir cargando sobre las espaldas del ahorrista más peso del que ya tiene. En lugar de promover los ahorros podrían desincentivar a la gente, que con tanto esfuerzo lleva su dinero a los bancos", comentó a Correo. Es decir, añadió, podría darse una desaceleración del ahorro porque no se aplican criterios técnicos, y en lugar de ello se quiere ir por lo más sencillo.