Las millonarias transferencias del Gobierno de Dina Boluarte a la gestión de Wilfredo Oscorima, autoridad regional de Ayacucho, a quien bautizó como su "wayki" (hermano) tras el escándalo del Rolexgate, caen en diversos cuestionamientos que ya generan alertas e indagaciones de la entidades de control.Boluarte, que alega que Oscorima solo le prestó los controversiales relojes de lujo de la marca Rolex, autorizó millonarias cesiones de presupuesto adicional al Gobierno Regional de Ayacucho. Mientras, se hacían más frecuentes las reuniones de Oscorima con la mandataria y luego con otros altos funcionarios del Ejecutivo.