LA INVERSIÓN EN INFRAESTRUCTURA NO SE DETIENE
8 de abril de 2024

No cabe duda de que el desarrollo de un país está determinado no solo por sus riquezas naturales, el nivel de educación de su población y su fuerza laboral capacitada, sino también se basa en una adecuada infraestructura, la cual permite elevar significativamente los niveles de productividad de su economía y la provisión de servicios públicos de muy buena calidad.Por ejemplo, la construcción del megapuerto de Chancay, al norte de la ciudad de Lima, está despertando una serie de inversiones en cadenas logísticas, dinamizando la economía en su etapa de construcción, revalorizando el valor de las propiedades adyacentes, y generando una interesante proyección de crecimiento económico y de más empleo a futuro.