El flamante ministro del Interior, Walter Ortiz Acosta, afronta una acusación fiscal por colusión y negociación incompatible por el presunto direccionamiento de contratos cuando era jefe de la Dirección de Pensiones de la Policía, en 2015. Es decir, está ad portas a un juicio. Según el requerimiento acusatorio, al que accedió Perú21, Ortiz se "concertó" con los directores de las oficinas de Logística y Abastecimiento para beneficiar a la compañía Termil Cáncer EIRL, cuyo dueño es Porfirio Sierralta Bolaños, con tres licitaciones directas para elaborar planillas de pago a pensionistas. Lo que advirtió la Segunda Fiscalía Anticorrupción es que la Dirección de Pensiones avaló el fraccionamiento en tres contrataciones cuando pudo tratarse solo de una.De esa forma, la compañía Termil Cáncer fue elegida para realizar tres consultarías: una sobre codificación de pensionistas sobrevivientes, otra sobre planillas de pensionistas y la tercera sobre actualización y gerencia de planillas.