Entre el engaño y la verdad. Una guerra mediática y política sacude al Ministerio Público-Fiscalía de la Nación. El detonante de este conflicto son las declaraciones del exasesor Jaime Villanueva, como testigo y aspirante a colaborador eficaz, en la investigación a la suspendida fiscal suprema y exfiscal de la Nación Patricia Benavides Vargas.Es evidente un cálculo político en lo que dice. Es consciente de que su declaración saltará a los medios de comunicación y el público en general, incluso antes de ser corroborada. Hay mucho de cierto en lo que dice, pero también hechos que no se podrán probar o que simplemente son fruto de su especulación, y solo alimentaran el escándalo.Así, por ejemplo, en su declaración del 24 de enero, Jaime Villanueva declaró que la presidente de la República, Dina Boluarte, recibía información privilegiada de las investigaciones que realizaba el despacho de la exfiscal de la Nación Patricia Benavides, a través de su abogado Óscar Nieves Vela.