Ni el suculento y aromático chifa que preparó la esposa del secretario general de Perú Posible (PP), Javier Reátegui, en su residencia de Las Casuarinas, pudo cambiar el ánimo del ex presidente Alejandro Toledo. Dos fueron los motivos que lo obligaron a retornar ayer a Lima y que lo mantuvieron cabizbajo: el delicado estado de salud de uno de sus hermanos y el retroceso en las negociaciones del Tratado de Libre Comercio (TLC) con los Estados Unidos.Sobre su problema familiar, Toledo no dijo mucho a los miembros del Comité Ejecutivo Nacional de su partido que participaron en la reunión-almuerzo. El encuentro se inició a la una de la tarde y terminó cerca de las siete de la noche. En donde sí intercambió ideas con Carlos Ferrero, Juan Sheput, Carlos Bruce, Daniel Mora, Jesús Alvarado, Marcial Ayaipoma y Doris Sánchez, entre otros, fue en el tema del TLC. Fuentes consultadas por Perú.21 señalaron que Toledo lamentó la postergación de las negociaciones hasta el año 2007, y consideró poco probable que dicho acuerdo comercial con EE.UU. se concrete en los próximos años. "Se perdió una gran oportunidad y va a ser bastante difícil, por no decir imposible, la ratificación del acuerdo", comentó a sus ex congresistas y ex ministros.