La inseguridad ciudadana y la criminalidad se han desbordado. Tal como ya lo informó Gestión, faltaría una estrategia clara para combatir la delincuencia, pues cuando se revisa la ejecución del presupuesto público que se asigna en la lucha contra este flagelo, hay avances importantes en el gasto, pero no necesariamente en los resultados.El Consejo Privado de Competitividad (CPC) compartió, en exclusiva con Gestión, un análisis sobre los recursos con los que cuenta el país para combatir estos flagelos y cuál ha sido el impacto hasta ahora.En los últimos cinco años, el gasto destinado a acciones que garanticen el orden, tranquilidad y seguridad pública se incrementó de S/7,130 millones, en el 2018, a S/8,123 millones en el 2022, lo cual significa un crecimiento acumulado del 13.9%.