Con el país en recesión, inseguro, a merced de la criminalidad, y que vive sin paz ni tranquilidad, a pesar de lo que ella asegura, 2023 terminará en números rojos para Dina Boluarte. La presidenta, señalada de no haber mostrado liderazgo, y que parece haber cedido su poder a su premier, despedirá el año sin haber detenido su nivel de desaprobación. El rechazo a su gestión volvió a incrementarse por tercer mes consecutivo y alcanzó el 84%, según revela la última encuesta que Ipsos realizó para América Televisión. La aprobación de la mandataria ya se encuentra por debajo de los dos dígitos (9%).El primer ministro Alberto Otárola también le dirá adiós a este año castigado con un 76% de desaprobación, su nivel más alto desde que se hiciera cargo de la Presidencia del Consejo de Ministros. La aceptación a su gestión se mantuvo en 9%.