Tras la masacre en la Compañía Minera Poderosa, en el distrito liberteño de Pataz, el gobierno anunció una serie de medidas para hacer frente a la inseguridad ciudadana y al crimen organizado que campea en la zona. También reveló, con bombos y platillos, que se había detenido a varios implicados en el cruento ataque que dejó nueve muertos y más de una decena de heridos.Ahora se ha hecho público que los detenidos no están implicados en dicho ataque y que si bien fueron encontrados con armas que carecían de registro, los mandos policiales a cargo de las pesquisas dieron "información no corroborada" al ministro del Interior y todo su comando.Este eufemismo hace que nos preguntemos si quienes dieron esta información no lo hicieron para intentar demostrar que el crimen organizado no los ha superado.(Edición domingo).