Las presiones recesivas aumentan y, con estas, la posibilidad de movimientos negativos en la calificación de riesgo de empresas peruanas, advierte Fitch Ratings, agencia que rebajó la nota a cinco corporaciones locales y solo mejoró la de una compañía en lo que va del 2023.A la fecha, más del 50% de las empresas a las que Fitch hace seguimiento tiene calificaciones BBB; al 32% se le asignó BB y las restantes tienen calificaciones de B o B+ -que no representan grado de inversión-.Sin embargo, la agencia prevé más recortes en el rating de las empresas peruanas en el mediano plazo, pues la desaceleración del consumo y las presiones inflacionarias rezagadas (acumuladas) plantean riesgos inminentes para la calidad crediticia de dichos emisores.