En octubre de 1993, una columna de aniquilamiento de Sendero Luminoso (SL) masacró a cinco personas en el caserío de Chuquibamba (Cajamarca).Más de treinta años después, Juan Santos Romero, alias ‘JJ’, uno de los senderistas implicados en el atentado, volvería a ser capturado por agentes de la Dirección contra el Terrorismo (Dircote), pero esta vez haciendo un trabajo de adoctrinamiento ideológico, incluso con niños.Tarjetas de presentación halladas por los agentes de la policía y la fiscalía confirmarían el modus operandi y parte de la fachada que venía utilizando Santos Romero en los últimos años, luego de su excarcelación en el 2006. El sujeto de 50 años se presentaba como "psicólogo", e incluso ofrecía "atención psicológica a niños", así como "terapia de pareja y familiar" en un inmueble ubicado en un centro poblado de Huanchaco (Trujillo).