El Ejecutivo publicó una ley que aprobó el Congreso, la misma que deroga la norma que regula la modalidad de ejecución de obras públicas por administración directa. La norma fue aprobada en el Congreso y no fue observada por el Ejecutivo, no obstante que tiene un mal precedente, pues, la modalidad de administración directa (AD) es la que genera el mayor número de obras paralizadas. Karla Gaviño, profesora de Gestión Pública de la Universidad del Pacífico, dijo a Correo que el Congreso tuvo la oportunidad de llenar el vacío que tiene la norma sobre AD para evitar que se sigan truncando las expectativas de la gente sobre obras que se les ofrece y no se concluyen .