La congresista Roselli Amuruz (Avanza País), tercera vicepresidenta del Parlamento, continúa siendo blanco de cuestionamientos por los hechos que han ido saliendo a la luz tras su participación en una fiesta de cumpleaños en Lince que terminó en un crimen. La situación de la legisladora se ha complicado debido a cinco contradicciones producidas en una semana a partir de declaraciones suyas y las de otros involucrados, así como de diversos hechos y evidencias que refutan sus versiones.