Como si se lo hubiera tragado la tierra. Han pasado más de 72 horas desde que el Poder Judicial ordenó que Vladimir Cerrón sea recluido en un penal, y la Policía Nacional aún no da con su paradero. Lo que es peor aún, el primer ministro Alberto Otárola dijo ayer que la PNP fue notificada tres horas después de confirmarse la condena efectiva contra el líder de Perú Libre, tiempo suficiente para que haya fugado del país o buscado un escondite. La Policía no descarta que Cerrón esté planeando pedir asilo político en las embajadas de Bolivia, Cuba, México, Colombia, y Venezuela en Lima. Por ello, fuentes policiales indicaron a Perú21 que la PNP está vigilando las cinco sedes diplomáticas, y todas las casas del cabecilla de Los Dinámicos del Centro.