La congresista Rosselli Amuruz (Avanza País), tercera vicepresidenta del Congreso, ya no enfrenta críticas solo por su entorno y su participación, el último sábado 30 de setiembre, en una fiesta que culminó en un asesinato en Lince.Ahora, de acuerdo a certificados migratorios, la legisladora suma nuevos cuestionamientos tras conocerse que viajó durante sus semanas de representación, en los últimos meses, junto a quien sería su pareja sentimental, el excongresista Paul García Oviedo (Acción Popular).