Las denuncias que comprometen a importantes funcionarios de este gobierno parecen nunca acabar. A aquellas que tienen que ver con las muertes ocurridas durante las protestas de diciembre y enero últimos, se han sumado hace poco las vinculadas a la concesión a dedo -dejada ya sin efecto ante el escándalo- de los lotes I, VI y Z-69 a Petro-Perú, y otras relacionadas con la cercanía de alguno de los ministros recién nombrados al prófugo exmagistrado de la Corte Suprema César Hinostroza, cabeza visible de Los Cuellos Blancos del Puerto.La lista, como se sabe, es más extensa, pero no por eso deja de sorprender el añadido de un caso que hemos conocido solo días atrás y que coloca al presidente del Consejo de Ministros, Alberto Otárola, en una situación difícil. El programa periodístico "Panorama", en efecto, propaló el domingo un reportaje en el que se revelaba que dos personas allegadas a él -Rosa Rivero Bermeo y Yaziré Pinedo Vásquez- obtuvieron contratos con el Estado tras haberlo visitado en su despacho.