La accidentada sesión matinal de ayer por poco termina con una censura a la segunda vicepresidenta del Congreso, Judith de la Mata, aunque sí acabó, para algunos, con un amargo recuerdo de épocas que se pensaban ya superadas.Javier Diez Canseco (SAUI) hizo notar su indignación y afirmó que "el país no solo ha vuelto a la época de las leyes sorpresa sino también a la de las leyes fantasmas", al referirise a la aprobación del proyecto que modifica varios articulos de la Ley de Concesiones Eléctricas, que se dio sin que el texto final de la propuesta haya sido conocido por la representación nacional.