A un mes de que el nuevo Congreso ingrese a un receso, se ha vuelto a poner sobre el tapete un asunto que, en su momento, mereció muchas horas de trabajo y discusión: castigar a los parlamentarios tránsfugas.Esta vez la iniciativa parte de la bancada de Alianza Parlamentaria (AP) y supone incorporar en la Ley de Partidos Políticos y en el Código Penal el delito del transfuguismo político.La propuesta --que será derivada a las comisiones de Justicia y de Constitución del Poder Legislativo-- plantea una pena privativa de libertad no menor de cuatro años y la inhabilitación por cinco años para el ejercicio de la función pública.Hay tres situaciones en las cuales se daría el delito de transfuguismo: cuando alguien abandona la agrupación por la cual fue elegido en las urnas para afiliarse a otra, con el fin de favorecer intereses políticos opuestos o manifiestamente distintos a los que ofreció en su campaña electoral; cuando lo hace para obtener un cargo político que no le corresponde a su agrupación; o cuando la decisión involucra cambiar las mayorías de gobierno. (Edición sábado).