El repunte de las importaciones chinas, que aumentaron 53% en el último año, habría golpeado fuertemente al emporio comercial Gamarra, al extremo que hoy no contaría con capital para atender pedidos en los próximos cuatro meses, afirmó el director de la Unión de Empresarios Textiles (Únete), Franco Servalli. "La microempresa está des-capitalizada por la competencia desleal que se presenta en el mercado, y en la actualidad trabaja con una economía de subsistencia, es decir, solo con lo obtenido en la campaña navideña", sostuvo. Precisó que la actual campaña, en comparación con la del 2005, arrojó saldos negativos, que pudieron ser más dramáticos si no fuera por la demanda del mercado venezolano, que se ha convertido en el segundo comprador más importante después de Estados Unidos."Las ventas en esta campaña disminuyeron 20%; sin embargo, la caída pudo llegar hasta 45% si no fuera por la demanda de Venezuela", dijo.