La organización criminal que, de acuerdo con la Fiscalía, lideró el expresidente Pedro Castillo se aprovechó de dicho cargo e instrumentalizó el aparato estatal para perpetrar delitos con el objetivo de hacerse de dinero y copar el poder. Precisamente, los integrantes de esta red criminal desarrollaron un programa que habrían ejecutado apenas Castillo Terrones fue proclamado mandatario por el Jurado Nacional de Elecciones. El Ministerio Público identificó cuatro modalidades delictivas que la organización criminal habría utilizado para concretar su plan: el copamiento indebido del poder, los lobbies ilícitos, los procesos de licitación fraudulentos y el implementar un brazo de protección.