Zoraida Ávalos dejó su cargo como fiscal suprema, el pasado miércoles 21, luego de que el Congreso aprobara inhabilitarla por omitir sus funciones. Su salida ha generado una confrontación política entre simpatizantes y detractores de la exfiscal de la Nación. ¿Fue justa la decisión? Ávalos decidió el 4 de enero de 2022 abrir una investigación preliminar a Castillo pero dejó en suspenso el inicio de la misma hasta que este termine su mandato. O sea, lo mismo que nada. La pesquisa no la inició de oficio sino a partir de la denuncia presentada por el procurador general, Daniel Soria. Para la fecha del inicio de la investigación, el 4 de enero, no obstante, el expresidente daba elocuentes indicios de no estar al frente de un poder del Estado sino de una banda criminal. Frente a Ávalos, hasta entonces, pasaron hechos delictivos paquidérmicos de Castillo que obvió sin ninguna justificación.