La actividad económica más cuestionada del país (y quizás la de muchos otros países) es la minería. Es una actividad poco comprendida, rodeada de mitos, imágenes y efectivamente historias no muy felices. Sin embargo, la minería formal, en el mundo y en Perú, no solo es vital para la generación de ingresos, inversión y trabajo, sino para el desarrollo tecnológico global, que hoy es cada vez más veloz y complejo.