El Gobierno promulgó ayer la norma aprobada por el Congreso para que los procuradores públicos del propio Parlamento, el Poder Judicial y diversos organismos autónomos sean elegidos por cada una de esas entidades. Hasta ahora, tales funcionarios eran elegidos por la Procuraduría General del Estado (PGE) y respondían a ella, pero ahora esto último tampoco será así.Como se recuerda, la iniciativa original fue aprobada en el Legislativo, en segunda votación, el 10 de mayo pasado, con 64 votos a favor, 41 en contra y cinco abstenciones, lo que revela la extensión del respaldo que este cambio tiene en la representación nacional y bancadas de todo signo político. Esto, en su momento, llamó la atención por la advertencia que hizo entonces el procurador general, Daniel Soria, a propósito del quiebre que lo establecido por la ley supone con respecto al sistema de defensa jurídica del Estado. "Si entra en vigencia, los procuradores de organismos constitucionalmente autónomos ya no podrán ser elegidos por concurso público", anotó en esa oportunidad Soria. Y señaló también que los procuradores deberían trabajar "sin influencias políticas o de cualquier naturaleza". Ambas cosas, como es obvio, han dejado de ser posibles al publicarse la norma que comentamos.