En cuatro años culminaría la explotación de la mina ancashina Pierina, propiedad de la canadiense Barrick; la minera estaá a la búsqueda de nuevos yacimientos que le permitan continuar sus operaciones en la zona y aprovechar las maquinarias que dejarán de operar en Pierina. Barrick ha apuntado a una propiedad que se encuentra a 20 kilómetros de su actual operación denominada Condorhuanín.Según informó un ejecutivo de la empresa, la minera recibió a fines de setiembre la autorización por parte del Ministerio de Energía y Minas para realizar las perforaciones en la propiedad, lo que les permitiría finalmente identificar si la zona es comercialmente aprovechable o no.