El ex presidente iraquí Saddam Hussein fue condenado a morir en la horca tras ser declarado culpable de crímenes contra la humanidad por un tribunal iraquí en Bagdad, más de tres años después de ser depuesto por una ofensiva militar de Estados Unidos.Saddam recibió la condena por la muerte de 148 chiitas de Dujail, tras un juicio marcado por las dudas en la imparcialidad del tribunal y la naturaleza de la jurisdicción elegida para juzgar los crímenes del antiguo régimen.Dos de los más estrechos colaboradores de Saddam Hussein también fueron condenados a la pena capital, mientras el ex vicepresidente iraquí Taha Yassin Ramadán fue sentenciado a cadena perpetua.