La construcción del Gasoducto Sur Peruano (GSP) se detuvo en el 2017, luego de que el Gobierno de Pedro Pablo Kuczynski resolviera el contrato con el consorcio liderado por Odebrecht, por no acreditar el cierre financiero del proyecto ya que dicha empresa tuvo problemas por sus escándalos de corrupción.Desde ese momento, el proyecto entró en un proceso de reformulación para estudiar la mejor manera de continuarlo. Cinco años después, lleva el nombre de Sistema Integrado de Transporte del Gas - Zona Sur del Perú (SIT-GAS) y pese a que aún no tiene los estudios totalmente concluidos, en el Ministerio de Energía y Minas (Minem) aseguran que en máximo tres meses se realizará la licitación para culminar su construcción.