La contaminación del río Corrientes, sobre el que se asienta la mayoría de las comunidades achuares, propició la revuelta que devino en la ocupación por catorce días de las instalaciones de la empresa Pluspetrol. La actividad petrolera estaría afectando a la población, ha señalado la Federación de Comunidades Nativas del río Corrientes (Feconaco).Sin embargo, según el ingeniero Fausto Roncal, de la Dirección General de Salud (Digesa), hasta el momento no existe ningún un estudio médico respecto al impacto que la actividad petrolera ha causado en los achuares. Lo que se ha encontrado son restos de plomo y cadmio en la sangre de un grupo de pobladores. Según Roncal, ambos metales pesados, no son originados por la actividad petrolera."Tienen que realizarse estudios que determinen el origen de estos metales. La actividad petrolera se evidencia a través de restos de hidrocarburos y cloruros en el medio ambiente", refirió Roncal. A mediados del próximo mes se realizarían nuevos estudios en la cuenca del río Corrientes para determinar la procedencia de estas sustancias.(Edición domingo).
- [El Comercio,Pág. A 7] /