El bloqueo al que están sometidas las estaciones 5 y Morona de Petro-Perú, en los ríos Marañón y Morona respectivamente, obligó a la empresa a paralizar el bombeo del crudo hacia el puerto de Bayóvar, a fin de mantener la integridad del personal y la seguridad de las instalaciones.Los locales están rodeados, en el primer caso, por unos 300 aguarunas, y en el segundo por un centenar de pobladores shapras y huambisas.El presidente del comité de lucha, José Valera Flores, confirmó que el último lunes cincuenta comuneros trataron de impedir a flechazos el aterrizaje de un helicóptero en la estación número 5. Sin embargo, no lo lograron y 23 policías pudieron reforzar la seguridad del local.