Este capítulo de la campaña podría titularse La resurrección. Porque el 'muertito' Luis Castañeda Lossio dejó el perfil bajo que había adoptado en las últimas semanas por estrategia política y abrió la boca. Y no solo para defenderse de las acusaciones de sus competidores, sino también para pegar, y pegar duro. Tal parece que, en este último tramo de la campaña, el alcalde de Lima comenzará a responder los ataques. Si es necesario, con adjetivos. Golpe por golpe.Castañeda rompió su silencio de varios días en una entrevista concedida a CPN Radio. Hasta entonces, sus voceros Marco Parra y Walter Menchola se habían encargado de rebatir el fuego a discreción lanzado desde varias trincheras, sobre todo desde Restauración Nacional, cuyo líder, Humberto Lay, levantó como banderas las denuncias sobre irregularidades en la construcción de la Vía Expresa de Grau y en la licitación de los semáforos de la avenida Canadá.A todas estas acusaciones, el burgomaestre contestó con un tono que pocas veces se le había visto antes.