A plena luz del día, peque dragas, dragas móviles utiliza das para la extracción ilegal de oro, recorren la cuenca alta del río Nanay, en la región Loreto. El difícil acceso a la zona, la indiferencia de las autoridades y la corrupción permite que este tipo de actividad se desarrolle con toda impunidad en la zona, poniendo en riesgo no solo al medio ambiente, sino también a los seres humanos. Según información recogida por el Servicio Nacional de Áreas Naturales Protegidas por el Estado, en lo que va del 2022 han sido destruidas 60 de estas embarcaciones.