La Sala de Derecho Constitucional y Social Permanente de la Corte Suprema declaró infundada la demanda de Nuevo Mundo Holding para declarar nula la resolución de la Superintendencia de Banca, Seguros y AFP (SBS) que dispuso la disolución y liquidación del Banco Nuevo Mundo en octubre del 2001. Con esta sentencia, según la SBS, se cerró el conflicto con los ex accionistas de la institución financiera, que pretendían solicitar una indemnización de US$500 millones de parte del Estado.Para los ex propietarios, el proceso de intervención y posterior disolución no se ajustó a la normativa vigente --razón por la que exigían la reparación--, pero para la SBS el proceso fue muy claro, pues el banco salió de la Cámara de Compensación (sistema de cobros y pagos entre bancos) debido a su falta de liquidez, lo que constituye una causal clara de intervención. Es más: incluso cerró sus ventanillas por falta de dinero, indicaron en la SBS. Y si bien se intentó el rescate del banco a través de su venta a otra institución financiera (al BIF), esta no se pudo concretar porque el interesado desistió y no quedó otra alternativa que disolverlo.Terminado el proceso legal, la SBS espera concluir el proceso de liquidación de dicho banco. El activo más importante en venta es el edificio donde se ubicaba la sede central, en San Isidro.