Resulta positivo que el Gobierno auspicie el lanzamiento de un seguro especial dirigido a peruanos que han migrado al exterior y a sus familiares que permanecen acá. Se trata de una iniciativa viable, que no fue considerada por los gobiernos anteriores y que no le cuesta al Estado.Se estima que casi un 10% de la población peruana vive en el extranjero y estaría en disponibilidad de participar en este programa pagando una cuota mensual. Es decir, unos 3 millones de compatriotas, que envían remesas anuales por alrededor de 1.300 millones de dólares anuales. Además, se prevé crear un fondo solidario para cubrir gastos de repatriación de quienes fallezcan en el extranjero en condición de indigencia.Lo que no parece pertinente ni viable es que este tema se politice, desempolvando iniciativas ya desestimadas. Por ejemplo, la de reformar la Constitución para que los migrantes tengan representantes en el Congreso, iniciativa que si no es bien estudiada, puede derivar en simplemente populista y de compleja ejecución. (Edición sábado).
- [El Comercio,Pág. A 4] /