El fin de semana, los gremios de aviación y turismo alertaron de que existe un grave riesgo de la continuidad de los vuelos en los próximos 10 días, como consecuencia de un posible desabastecimiento de combustible que usan los aviones, conocido como diésel turbo.Esta alerta fue enviada por Petroperú, quien señaló que no podría cubrir la cuota de suministro que se corresponde. Pero la petrolera estatal cubre solo el 20% del mercado, el 80% restante está cubierto por Repsol, a través de la Refinería La Pampilla.Ayer, Petroperú afirmó que ya tiene contratada la importación de 200,000 barriles de turbo A-1, cuyo arribo está programado para el 23 de julio próximo, pero que estará disponible recién el 27 de este mes. Es decir, si no hay inconvenientes, recién en nueve días se contaría con el combustible.