El negocio de las confecciones, qué duda cabe, es uno de los más amplios (abarca la confección de trajes, ropa interior, de vestir y deportiva, entre otros) y dinámicos del mundo, pues no solo modifica con el paso del tiempo sus tendencias, sino que además abre nuevos nichos de mercado, que ofrecen importantes oportunidades de crecimiento que deben ser mejor aprovechados por el exportador de hoy. En ese sentido, Estados Unidos, mercado que mueve anualmente US$75.730 millones al año en el rubro de prendas de vestir, se convierte en nuestro mejor destino. Por citar un caso, a raíz del crecimiento que ha tenido la carrera de medicina y enfermería, ha surgido una mayor demanda por la confección de uniformes orientados a esta profesión. "El despegue de esta carrera ha hecho que surja toda una demanda en torno de la confección de uniformes para médicos y enfermeros", sostuvo Betty Webb, representante de la Asociación Americana de Productores de Prendas de Vestir de EE.UU. Pero esta no sería la única variación, pues a ello se suma el giro que han dado algunas entidades bancarias o financieras, al dejar los trajes de corbata de lado para instaurar, los jueves y viernes, ropas informales.(Edición sábado).