El último jueves 12 de mayo, el gobierno autorizó, mediante decreto de urgencia, inyectar US$ 750 millones a Petroperú con el fin de garantizar el abastecimiento de combustibles en el país. Esta medida económica de corte extraordinario constituye no solo un espaldarazo a la actual administración de Petroperú, sino un claro mensaje de enmendar lo que hizo la administración anterior, aquello que meses atrás llevó a la petrolera estatal al borde del colapso financiero.(Edición domingo).