La visita a Estados Unidos le sirvió al presidente Alan García para obtener nuevos bríos. Y es que no sólo la emprendió contra Venezuela, sino también en forma indirecta contra Bolivia e incluso Cuba. Al referirse a la participación de Venezuela en la posible instalación de bases militares en la frontera entre Bolivia y el Perú, García subrayó que del país llanero cualquier cosa se puede esperar. Consideró que la construcción de esas bases es un hecho inamistoso y ofensivo que preocupa por ser Bolivia un país amigo, pero que la situación se complica porque eso es parte de un acuerdo militar estratégico con Venezuela. "Nos preguntamos qué tiene que ver un tercer país en el establecimiento de bases entre dos países que siempre han sido amigos y hermanos. Ahora, en las circunstancias actuales de Venezuela, cualquier cosa podemos esperar", refirió.
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