El 12 de abril último, la nueva refinería de Talara inició las pruebas de arranque gradual y progresivo para su operación de producción de combustibles.La infraestructura, que demandó más de US$ 5,083 millones para su construcción, deberá enfrentarse a sus primeros problemas de rentabilidad.En Petroperú, empresa estatal responsable de la construcción y operación de la refinería, están preocupados por el proyecto de ley que busca extender 10 años más los contratos de lotes petroleros que operan en la actualidad.El presidente de la petrolera estatal, Humberto Campodónico, afirmó que hay un grupo de lotes petroleros de la zona de Talara cuyos contratos están próximos a vencer y la intención es que Petroperú tenga una participación accionaria en la operación de estos una vez vencidos los contratos.
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