Los conflictos sociales en torno a los proyectos mineros de Las Bambas (Apurímac) y Cuajone (Moquegua) generan pérdidas de más de 10,000 empleos directos, aseguró el presidente de la Sociedad Nacional de Minería, Petróleo y Energía (SNMPE), Raúl Jacob."Por cada puesto de trabajo fijo en el sector minero, se generan ocho puestos de manera indirecta porque las operaciones mineras necesitan personas que atiendan los servicios de sostenimiento de los campamentos.Son 80,000 puestos de trabajo indirectos en peligro más los 10,000 (directos)", comentó ayer durante la presentación de la 14 edición del Simposium Internacional del Oro, Plata y Cobre, que se realizará entre el 10 y 12 de mayo próximo.