La fábrica Cementos Lima culminó la instalación de los equipos para el uso del gas natural de Camisea en su planta principal e inició el consumo de este nuevo combustible en su horno más grande, con lo cual prevé reducir la contaminación del medio ambiente con gases de carbono.El uso del gas natural ha significado para la compañía una inversión de 5.4 millones de dólares, en ductos de transporte, estaciones reductoras de presión y quemadores especiales, informó la empresa. Remarcó que la sustitución del carbón y otros combustibles sólidos por el gas de Camisea reducirá las emisiones de gases de carbono (CO2) de la fábrica, lo cual constituye un importante avance medioambiental para asegurar el menor impacto posible de la compañía en el entorno de sus instalaciones productivas.Cementos Lima gestiona el registro de su proyecto de cambio de combustible en las Naciones Unidas, dentro del Mecanismo de Desarrollo Limpio del Protocolo de Kyoto, para posteriormente emitir Certificados de Reducción de Emisión de Gases de Carbono.