Los presidentes de Estados Unidos, George W. Bush, y del Perú, Alan García Pérez, se comprometieron a "promover la expeditiva extradición" de los miembros de los cárteles de las drogas, propuesta planteada por el jefe de Estado peruano.Según la declaración conjunta de ambos dignatarios, Bush y García, reafirmaron su decidido compromiso de proteger a sus pueblos y al hemisferio de la destrucción que causan el terrorismo y las organizaciones criminales transnacionales.Sobre la base del "principio de responsabilidad compartida", destacan los esfuerzos de Perú y los programas de los EEUU en infraestructura y capacitación para fomentar la presencia policial en las zonas cocaleras, y el desarrollo alternativo en aquellas áreas donde antes se cultivaba la hoja de coca.