TLC: RECTA FINAL
9 de octubre de 2006

Es lógico que aquellos que participaron en las etapas previas para conseguir un TLC con Estados Unidos estén preocupados. En ese sentido, ha habido expresiones de temor viendo que los plazos se acortan y nos acercamos a fin de año sin que el Congreso de ese país haya aprobado nuestro Tratado. Mercedes Aráoz, José Antonio García Belaunde, Hernando de Soto y Felipe Ortiz de Zevallos son nuestro dream team y harán lo posible por lograrlo. Además, el presidente García irá a Estados Unidos invitado por el presidente Bush y la agenda contemplará este tema. A pesar de estos esfuerzos, el momento no es auspicioso. Los congresistas americanos están en campaña electoral y se encuentran buscando votos en sus respectivas circunscripciones. Regresan el 13 de noviembre a la llamada lame duck session -sesión del pato rengo-, conocida así porque muchos de los congresistas que la conformarán no habrán sido reelectos y es en esta legislatura corta, poselectoral, con congresistas que ya no vuelven al Congreso, donde se pondrán a debate una serie de leyes, entre ellas las relacionadas con temas presupuestales que, como en cualquier país, son prioritarios. Por ello, hay que tratar que el Ejecutivo americano mande la ley de implementación del TLC con Perú y luego buscar aprobar el Tratado en ese lapso. En caso de que los demócratas logren ganar en la cámara baja, habrá que hacer un esfuerzo adicional para que los demócratas que hoy están sentados en dicha cámara voten a favor de un Tratado de Libre Comercio considerando que ellos son, en gran parte, opositores de este tipo de acuerdos comerciales.Pero la visita de Bush a Vietman, con motivo de la cumbre de líderes de la APEC el 19 de noviembre, nos debe ayudar. Vietnam está, junto con Perú, a punto de aprobar un acuerdo comercial y será complicado para Bush llegar a ese país asiático sin éste. Ambos acuerdos deben aprobarse juntos. Los que piensan que el presidente García debe visitar congresistas se equivocan; están en campaña fuera de Washington. En cambio, los americanos deberían meditar sobre la importancia de contar con un TLC con Perú en el contexto de las relaciones sudamericanas, donde el eje Chávez/Morales debería hacerlos reflexionar sobre los beneficios de un socio comercial como Perú. El TLC es una herramienta potente para ayudarnos a salir de la pobreza, pero también es un vehículo que acerca países. Ni Perú ni Estados Unidos deben desaprovechar esta oportunidad, señala Cecilia Blume.