La guerra en Ucrania ha creado la tormenta perfecta para que los precios de los hidrocarburos -que ya venían escalando en meses previos- anoten nuevos récords con negativas consecuencias para países como el Perú, que importan casi todo lo que consumen."El efecto sobre el petróleo, las gasolinas y el gas licuado (GLP) nos va a pegar muy fuerte", explica Gonzalo Tamayo, ex ministro de energía y minas.A pesar del terrible contexto de guerra, el alza del precio del gas natural podría aportar beneficios para el Perú debido a que se trata del único combustible que producimos en abundancia y que exportamos, precisamente, hacia Europa y Asia, donde se paga más por él.