Luego de que, el mes pasado, Repsol derramara cerca de 11,000 barriles de petróleo en el mar de Ventanilla, el Congreso plantea endurecer las medidas para que las empresas que realizan daños ambientales no puedan acceder a beneficios tributarios, como la reducción al Impuesto a la Renta (IR), derivados de los gastos por remediación.