Mientras el país seguía con aprehensión el avance de la marea de petróleo en el litoral de Lima, el Ejecutivo se apuraba en publicar el esperado informe final sobre la renegociación del gas de Camisea, tópico que crispaba el ánimo de los peruanos hasta hace muy poco.El resultado es un informe de 274 páginas, que dista mucho de la concepción original de Bellido y de las promesas electorales del Gobierno.De hecho, uno de los integrantes de la comisión multisectorial comentó a El Comercio que esperan un "intenso petardeo" por parte de Perú Libre, debido al cariz apolítico del informe, que excluye medidas radicales como la nacionalización de Camisea.