A diez días de producido el derrame de 6,000 barriles de petróleo frente a Ventanilla, y ante el incumplimiento de Repsol de los plazos que le dio OEFA para realizar la limpieza del crudo vertido, el Gobierno anunció que evalúa sanciones mayores (a las administrativas que prevén OEFA y Osinergmin) y que podrían conllevar a la paralización de la empresa (refinería La Pampilla).El anuncio lo hizo el ministro del Ambiente, Rubén Ramírez, que advirtió además que evalúan, a través del procurador (de su sector), "ver un tipo coercitivo para garantizar que los miembros del directorio de la empresa estén presentes en el proceso penal y respondan por el daño hecho".