En la quincena de enero vence el plazo para que Azteca Comunicaciones devuelva al Estado (MTC) los bienes de la concesión que asumió para la operación de la Red Dorsal Nacional de Fibra Óptica (RDNFO), tras producirse la caducidad de su contrato hace casi cinco meses atrás.Sin embargo, hay incertidumbre sobre el estado en que el MTC recibirá los activos, pero más aún respecto de las nuevas condiciones en que operará provisionalmente esa red de 13,000 kilómetros, hasta que se vuelva a concesionar en los próximos años.