Las Bambas. A medida que el efecto estadístico se diluye en las cifras macroeconómicas, está cobrando más peso el "efecto desconfianza": la postergación (o cancelación) de inversiones y operaciones de las empresas ante la actitud hostil del Gobierno contra la iniciativa privada, los constantes yerros en nombramientos en el Ejecutivo, la incompetencia e incesantes metidas de pata y escándalos del presidente Castillo y varios de sus ministros y allegados, y las iniciativas orientadas a elevar la carga tributaria de quienes sostienen la recaudación (o la insensata idea de que los gobiernos regionales decidan qué actividades permitir).El sector que está siendo más afectado por ese efecto es la minería, irónicamente el principal contribuyente y generador de divisas, y significativo aportante de inversión directa. Al fallido anuncio de cierre unilateral de minas hecho por la premier Mirtha Vásquez en noviembre -tuvo que retractarse, pero el daño a la confianza ya estaba hecho-,se suma ahora la decisión de MMG, propietaria y operadora de Las Bambas, de suspender la producción a mediados de este mes.Ello debido a que continúa enfrentando problemas logísticos por el bloqueo de vías de acceso, ejecutado por comuneros de la provincia de Chumbivilcas (Cusco) porque no se ha llegado a ningún acuerdo en las reuniones con representantes del Gobierno y MMG. La minera, cuyo principal accionista es una empresa estatal china, señala que los comuneros tienen "demandas comerciales excesivas". Hasta ahora, el Gobierno no ha tomado ninguna iniciativa, pero está claro que la paralización envía señales negativas sobre cómo está tratando el Perú a la inversión extranjera.