La ministra chilena de Minería y Energía, Karen Poniachik, visitó nuestro país con motivo del Cuarto Congreso de Mujeres Mineras y conversó con El Comercio. Evitó hablar de todo lo que implicara una comparación entre nuestros países, pero la información que nos brindó sobre diferentes facetas de la actividad minera en Chile evidencia una orientación estratégica, para no exportar solo cátodos, que vale tener en cuenta. Una muestra es el recién creado impuesto específico para la actividad minera en Chile, aplicado de acuerdo con los niveles de producción de cada empresa, que es destinado íntegramente a financiar un fondo de innovación.¿Cómo funciona el impuesto específico a la actividad minera que se acaba de empezar a aplicar en Chile?Está operativo desde enero del presente año y los fondos obtenidos vía este impuesto no irán a financiar el gasto corriente del Estado Chileno, sino que irán a un fondo especial, dedicado a financiar los proyectos de innovación levantados por empresas en asociación con centros académicos y con el Estado.¿Piensan seguir con el esquema de manejo público-privado de la minería?El esquema vigente de cooperación público-privada ha sido clave para el desarrollo del sector. Como Gobierno hemos trabajado siempre en conjunto con el sector privado minero de la gran, mediana y pequeña minerías para abordar las oportunidades y los desafíos que tenemos por delante. Ese es un esquema similar al de asociación público-privada que mantenemos en otros sectores económicos como infraestructura y tecnología.